ORACIÓN 7 "POR EL CRECIMIENTO ESPIRITUAL DE NUESTROS HIJOS".

Padre Eterno pongo delante de tu presencia la vida espiritual de mis hijos, y te suplico con todo mi corazón que no y anden por esta vida sin conocerte y sin tener una profunda relación contigo y una comprensión real de quién eres tú. Juan 17:3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
Oro para que oigan tu voz claramente como lo dice tu palabra en Juan 10:27 Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen. Te pido que pongas tu temor en ellos, que tiemblen ante tu palabra como lo dice tu palabra en Isaías 66:2 Pero a este miraré con aprobación: al que es humilde y contrito de espíritu, y que tiembla ante mi palabra.
Oro para que amen tu palabra por sobre todas las cosas y la atesoren en su corazón como su posesión más preciosa. Proverbios 7:1
Oro para que tu palabra sea su norte (Salmo 119:105) y los apartes del pecado, que no pequen contra de Ti de manera alguna. Oro para que cuando pequen y se equivoquen Tú los redarguyas y los conduzcas al arrepentimiento inmediatamente. No permitas que entristezcan, resistan o apaguen la voz de Tu Espíritu de manera alguna. Salmo 51:4
Que Tu palabra habite de tal manera en ellos que no puedan pecar contra ti. En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. Salmo 119:11
Ato a mis hijos a tu VERDAD, A TU VOLUNTAD PARA ELLOS, ATO SUS MENTES A LA TUYA, LOS ATO A LA SANGRE DE CRISTO Y A TU PROPÓSITO PARA SUS VIDAS.
Arranca el corazón de piedra y dales un corazón de carne sensibles a la voz de tu Espíritu. Ezequiel 36:26 Además, os daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros; quitaré de vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón de carne. Que tengan la capacidad de obedecerte y tener temor de ti todos los días de sus vidas. Lejos estén mis hijos de TODA REBELDÍA E INDIFERENCIA A TI MI DIOS y a tu Palabra. YO ORO PARA QUE MIS HIJOS DESARROLLEN UNA FE GENUINA, una fe que te agrade, una fe que les haga ver grandes cosas de ti. Una fe que los lleve a seguirte por convicción. Que nunca les falte la fe a mis hijos. Que ellos te reconozcan como Señor, su salvador y su único Dios y que en ti tengan contentamiento y verdadero gozo.
Que en sus corazones y sus bocas haya reconocimiento de quién eres tú en realidad. Que la decisión de SEGUIRTE A TI TODA LA VIDA, sea una determinación inamovible en sus corazones. Que siempre tengan HAMBRE Y SED de ti, de tu palabra, de tu amor.
Que sus emociones estén libres de condenación, culpa, remordimientos, prisiones espirituales, rechazos, amargura, falta de perdón, incredulidad y traumas.
Te suplico en el nombre de Jesús. Ayúdales a ser personas equilibradas, maduras, responsables, llenas de cordura y de verdad. A aprender a tomar decisiones de tu mano y a asumir las consecuencias de sus actos, a corregir el rumbo, aprender de sus errores, a confiar en ti y conocer tu gracia, tu amor y tu misericordia. Suplico porque sus vidas reflejen todos los frutos del Espíritu Santo. (Gálatas 5:22-23) Tu promesa dice que DERRAMARÁS DE TU ESPÍRITU SOBRE MI DESCENDENCIA (Isaías 44:3); también dice que EN LOS POSTREROS DIAS DERRAMARÁS DE TU ESPÍRITU SOBRE TODA CARNE (Joel 2:28). Suplico en este momento el cumplimiento de estas promesas.
Te invoco ahora Espíritu Santo, sobre la vida de mis hijos, te invoco para que trabajes en ellos y los convenzas de justicia, pecado y juicio. Suplico que mis hijos NUNCA MAS ANDEN SIN TÍ, ESPIRITU SANTO. Encomiendo ahora, a ti todo esto, confío en ti y creo que tú lo harás. Gracias porque eres propicio a mi oración en el nombre de Jesús.